Cuando sufrimos una fractura, esquince o lesión similar, es
muy probable que nos hayan tenido que poner férula de yeso, que son muy
incomodas y nada practicas. Se ha descubierto recientemente otra forma de curar
estas lesiones (aunque por ahora solo se ha utilizado en lesiones de ligamentos),
que acabara con las molestas férulas de una vez por todas y permitirá que el
paciente pueda comenzar antes la rehabilitación en los casos que se necesite.
Se trata de un soporte interno que se introduce en el cuerpo
con una laparoscopia. Este procedimiento surgió de la mano del profesor Gordon
Mackay, cirujano ortopédico del Hospital Ross Hall, en Glasgow, que deseaba
encontrar una forma de evitar el desgaste muscular que provoca el enyesado y la
inconveniencia de tener que usar cabestrillos y botas especiales.
Este proceso permite el movimiento del tejido pero al mismo
tiempo ofrece un apoyo en el ligamento mientras está sanando. Esto significa
que el paciente no necesita estar inmovilizado y puede recuperarse mucho más
rápido.
Por otro lado, de la mano de Jake Evill encontramos otro
procedimiento que intenta lo mismo que el anterior, acabar de una vez por todas
con las molestas férulas de yeso. Jake ha creado lo que él llama “cortex”, utilizó
materiales reciclados para construir su prototipo a partir de desechos
reciclados compuestos de poliamida, que es un polímero que contiene enlaces
tipo amida que se puede encontrar en materiales naturales, como la seda o la
lana, y en materiales compuestos, como el nailon y el kevlar. En la siguiente
imagen observamos su prototipo:
Las ventajas de este diseño son que es ligero y delgado, se
puede utilizar sin problemas por debajo de la ropa y además no permite malos
olores por su ventilación natural, y más importante aún es que el completamente
lavable por lo que no hay ningún problema al bañarse con él.